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Victoria importantísima hoy del MoraBanc Andorra en la pista del Alimerka Oviedo por 63-79 que combinada con la derrota del Palencia en Lleida hace que el fin de semana sea muy interesante. Faltan 3 jornadas para terminar el campeonato y los de Lezkano tienen dos victorias de ventaja en el liderazgo. Y aunque las cosas pintan muy bien es importante remarcar que el trabajo no estará hecho hasta que esté hecho y la decepción de hoy hace 7 días en casa contra Almansa es un recordatorio imprescindible de los riesgos de no jugar con la máxima concentración. Sea como fuere el disgusto de hace una semana pareció planear sobre el partido de hoy y las consecuencias las pagó Oviedo porque se encontró una versión muy seria de los tricolores. Desde los primeros momentos de partido ha quedado clarísimo que el MoraBanc no haría concesiones y esto para los locales ha sido una montaña imposible de escalar. Hay diferencia entre ambos equipos, afirmación tan cierta como peligrosa si no haces lo necesario para dejarlo claro. Esto ha hecho hoy el MoraBanc Andorra.
El primer cuarto ha enviado información valiosa sobre la idea con la que el MoraBanc se plantaba sobre el parqué de Pumarín. Por un lado, la primera idea en ataque siempre ha sido la continuación hacia dentro para aprovechar la superioridad de Felipe y Maric. El perímetro debía esperar a paciente a que se generaran los espacios. En ataque la cosa iba por ahí y detrás el tema era la concentración. El MoraBanc ha tenido más o menos buenas decisiones en defensa pero no ha negociado el esfuerzo y la concentración ni una sola vez. Al final del primer cuarto 16-19 y la sensación de que las cosas irían en mejor en cuanto se encontrara un puntito más de inspiración ofensiva. Y así fue. El segundo cuarto la defensa tricolor ha cerrado casi todos los caminos a los asturianos. Y poco a poco la diferencia ha ido ensanchándose hasta los 17 puntos que han quedado en 13 en el descanso, 26-39. Los primeros minutos del tercer cuarto rompieron el partido. A la seriedad atrás se ha añadido acierto de fuera liderado por Andric (5 triples) y el partido ha reventado llegando incluso a los 30 puntos de diferencia (29-59). Y de ahí hasta el final hay que remarcar el trabajo de los locales para acabar de pie y dejar el marcador con 16 puntos de diferencia en vez de 30 poniendo piernas y coraje. El MoraBanc ha transitado por los últimos 12 o 13 minutos de partido saben que el trabajo, hoy, estaba hecho. Y está bien que esa frase acabe la crónica. Trabajo realizado, por hoy. Quedan 3 partidos y la cosa se ha puesto muy bien pero cada vez que alguien dice “esto está hecho” nos anotamos dos puntos en nuestra cesta por el partido del sábado (18h30) en casa contra Alicante. Esto no está hecho. Así sí.
